2. mayo 2021

RAYAS SIN FIN

Social gathering!

Han pasado casi dos meses desde la última vez que estuvimos en el Parque Nacional Etosha. Entonces, no solo nosotros, sino también Gabi, nuestro amigo de Swakopmund, queríamos un viaje extendido para ver animales silvestres. Acordamos encontrarnos con Gabi en Tsumeb y desde allí conducir juntos a través del Etosha y luego a Ruacana, en el río Kunene, que forma la frontera con Angola.

Después de que nos reunió el 28.4, cuando nos despedimos de nuestros visitantes de Suiza en Spitzkoppe, condujimos unos quinientos kilómetros al norte, hasta Tsumeb. Allí encontramos a Gabi, con quien nos dirigimos al Parque Nacional de Etosha dos días después. Una breve parada en Fort Namutoni, luego condujimos alrededor de Fisherpan, donde nos encontramos con pelícanos y flamencos en busca de comida en las aguas poco profundas.

Un día después, de camino a Okaukuejo, nos encontramos con el pozo de agua de Gemsbokvlakte. Desde lejos vimos que allí se había reunido una enorme manada de cebras. Y cuanto más nos acercábamos, más había. La buena lluvia en Etosha ha permitido que crezca la hierba, lo que no solo agrada a las cebras …

PS. Los numerosos springboks, que también apagaban su sed en el abrevadero, apenas se veían debido a los pasos de cebra.

Para diseñar de forma óptima este sitio web y mejorarlo continuamente, utilizamos cookies. Si continúas leyendo en este sitio web, aceptas las cookies. Puede encontrar más información en la página de protección de datos.