
We made it!
Nuestro próximo destino es la Reserva Natural de Baviaanskloof en el este del país. (Espero que no haya demasiados babuinos allí, porque desde que robaron nuestro yogur de la mesa del desayuno en el Tercer Puente en Botsuana hace muchos años, ¡odio a estos bichos!) Pero volvamos al tema.
El 26 de septiembre de 2024, a las 10 am., dejamos la bonita Ladismith y nos dirigimos hacia el este, hacia Calitzdorp. Allí parte una pista que pasa por el paso de Swartberg hacia el pueblo Prince Albert. Habíamos viajado allí hace un año –en aquel momento con Orapa a bordo– en dirección opuesta. El segundo cruce también nos emocionó. Las proteas aún no estaban en plena floración, pero estaban muy bonitas. El paso está a 1.560 metros y desde allí teníamos una gran vista de los alrededores. A continuación, el camino desciende hacia el valle donde se encuentra el bonito pueblo Prince Albert. (En este viaje cruzamos el arroyo donde Brigitta había bautizado a Orapa hace un año. Guardamos un minuto de silencio en memoria de este gato inolvidable que habíamos salvado del hambre en Orapa, Botsuana.)
No hay nada más idílico que esta población. Una bonita casita está alineada al lado de otra. También es turístico, pero eso también tiene sus ventajas porque hay buenos restaurantes. En uno llamado Local Roots, nos regalamos Chicken Liver Piri. Sabía muy bien, al igual que la cerveza artesanal y el brownie de postre.
PS: Si quieres saber más sobre el Swartberg Pass, lee aquí.